La capital de las Highlands de Escocia, es un tesoro escocés que combina el encanto histórico con la belleza natural en un escenario impresionante.
Situada en las orillas del río Ness, la ciudad se enmarca con colinas ondulantes y bosques exuberantes. Su casco antiguo está impregnado de historia, con edificios de arquitectura georgiana y calles adoquinadas que evocan un ambiente clásico. El Castillo de Inverness, con su torre medieval, domina la ciudad y ofrece vistas panorámicas. Además, el río Ness serpentea a través de la ciudad, añadiendo una sensación de serenidad. Inverness es también un punto de partida para explorar las Tierras Altas escocesas, con fácil acceso a lagos, montañas y castillos.